viernes, 20 de mayo de 2011

Positividad...en lo incierto y en la calma...

20 de Mayo:
Hoy, en clases estuve muy activa y participativa.. pese a que tenía sueño, el tema que estábamos viendo despertó mi interés, lo que fue muy positivo, ya que disfruté de la clase, y se me pasó el tiempo mucho más rápido... Me gusta aprender así, estando concentrada, y siguiendo el hilo de las temáticas que presentaba el profesor... Después de eso, fui a imprimir mi trabajo y el de una amiga, me sentí bien de haberle dado una mano, y haberla acompañado a terminar su ensayo de filosofía... Para la hora de almuerzo, fue increíble, es como que todos los viernes nos entusiasmamos con la conversación... Fue muy divertido, me siento realmente agradecida y feliz de contar con un grupo de compañeros tan entretenidos e interesantes.. siempre sale un tema muy chistoso, un momento de humor en medio del descanso que nos ayuda a despejarnos, para después retomar las clases con la mejor disposición.... El resto de las clases me sentí un poco cansada...así que me retiré un poco antes de que se acabaran las clases... Lo que ocurrió después, en verdad en su momento me asustó mucho, pero ahora que lo escribo, luego de que estoy bien, veo las cosas diferentes... Resulta que no comí nada desde la hora de almuerzo, a las 13:30hrs, y como me retiré antes de clases, alcancé justo el bus de acercamiento, y no tuve tiempo de comprarme nada para comer.. quería hacerlo, pero no alcancé...Eso significaba aguantarme hasta llegar a la estación pajaritos...Pero resulta que cuando iba en la mitad del viaje en el metro, digamos, había pasado una media hora, y estaba cada vez más lleno y sofocante... Empecé a sentir una fatiga terrible, no era hambre, sino una baja de azúcar, una hipoglicemia,,,parece que además, acompañada de una baja de presión... Horror!.. yo tomé un poco de agua, pero el malestar empeoraba con cada segundo que transcurria... Le avise a una mujer que estaba al lado que me estaba desmayando, que me iba a sentar en el piso... pero cuando me estaba agachando, se me taparon los oídos y empecé a ver cada vez más borroso... en ese segundo volvi a incorporarme como pude y un hombre me vió y comprendió que necesitaba salir de allí.. él me ayudó a abrirme paso entre la gente y salí del tren.. apenas pude ver un asiento vacío en los andenes y me dejé caer en el... tomé agua y no se me pasaba.. pedí ayuda a una mujer que estaba sentada al lado, le dije: disculpe, no tiene un dulce? es que me estoy desmayando...por suerte que lo tenía, y me lo dió... pude ver otra mano acercándome un yogurt... me lo tomé, rogando que mi cuerpo reaccionara pronto... me costó mucho volver a sentirme bien... me dio mucha mucha angustia: estaba sola, llevaba mi notebook, si me llevaban a algun lugar, no conosco santiago.. si me desmayaba dónde iba a despertar... pensaba: tengo que llegar a mi casa, mañana vienen a trabajar la nati y la vane a mi casa en viña... terrible... y si me devolvía al departamento en santiago, tendría que caminar en este estado, de noche y sola...y pasar la noche sola también allí.....  
Pasaron unos minutos y por fin me volvió el color al rostro... la mujer me dijo: estabas pálida...conversé un momento con ella, mientras me calmaba, y le agradeci de todo corazón su ayuda... luego retomé el camino... 
Pero cuando llegué a pajaritos, a eso de las 19:20hrs, saqué pasaje y no podía creer que mi pasaje, el más próximo a Viña, decía 21:50hrs... era mucho!! quise llorar...en ese estado, aún mareada.. pensé: me devuelvo al depto o espero aqui más de 2 horas... Al final esperé en una cola al lado de los buses, por si quedaba algún puesto vacío... se fueron varios buses, y la cola avanzó, hasta que por fin pude irme a las 20:15hrs...rogaba a Dios para poder irme a Viña pronto y así fue.... Tuve suerte, a pesar de todo tuve suerte... veo lo positivo ahora... gracias a Dios que me pasó la fatiga en el metro y no en alguna micro, gracias a Dios que estaba esa mujer allí, que pudo ayudarme,  gracias a Dios que no me devolví al departamento: luego me enteré que con las protestas que hubo, cerraron las estaciones del metro, y si me hubiera devuelto habría quedado en el camino... Menos mal!!!...todo salió bien, después de todo, y llegué a casa sana y salva... Hoy aprecio, como nunca, la preocupación y la empatía en momentos de necesidad y urgencia...Uno suele criticar el ambiente del metro: que la gente es estresada, que todos empujan, que hasta se pelean e insultan... pues hoy, hoy vi consideración, hoy vi colaboración, hoy vi ayuda, hoy vi un tender la mano a alguien, que aunque no conozco, necesita ayuda y se la daré sin dudarlo.... Me quedo con esa mirada, y valoro más que nunca el haberme dado cuenta de eso... Ahora que lo pienso bien, puedo decir que gracias a Dios, yo NO estaba sola...

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